Este año más que nunca, he visto como en las distintas oposiciones de promoción interna, se ha generalizado la queja de que los respectivos temarios no han sido lo suficientemente claros acerca de los manuales por los que se deberían haber preparado, ya que en dichos los mismos se utilizaron expresiones tales como "PODRÁ SER ESTUDIADO POR CUALQUIER MANUAL AL USO"; expresiones tan poco acertadas que han llevado a muchos opositores - entre los que me encuentro - a fracasar en el examen.
En las universidades, las asignaturas de derecho, se estudian por un manual concreto y fijado de antemano, y no siendo bastante con eso van más allá especificándose la editorial y el año de la edición , ya que como de todos es sabido dependiendo del autor, se utiliza una terminología u otra, y el enfoque del tema varía mucho de unos a otros.
En virtud de lo anterior, creo que lo justo sería pedir a la Jefatura de Enseñanza que en aras de la seguridad jurídica de las oposiciones, se especifique lo anterior, ya que de otro modo, ese oscurantismo contribuye a generar sospechas acerca de que determinadas academias SÍ tenían conocimiento de ello y el porcentaje de sus alumnos que han aprobado fue muy superior al resto.