[align=justify]Al parecer, la Secretaría de Estado de Seguridad le ha dado un tirón de orejas al mando de la VI Zona a cuenta del procedimiento irregular seguido por éste en materia de prevención de riesgos laborales, en concreto, el mando ha impedido de forma arbitraria la participación de un guardia civil en el procedimiento de transmisión, propuesta e información en materia de riesgos laborales. Y no sólo eso: la SES le ha recordado al mando que el órgano de prevención de la Zona debería haber intervenido y haber hecho cuantos informes procediesen al respecto, porque NO HA HECHO NADA y ha sido incapaz de elevar a la SES los informes que ésta le requirió en este caso. No es lo mismo predicar que repartir trigo, es decir, predicar con el ejemplo. Para que luego exijan al subordinado lo que ellos no son capaces de hacer.
Y los responsables de la SES les han dicho a los "valencianos" que no, que no se puede ahcer lo que han hecho -y dejado de hacer-,que los procedimientos están legislados para ajustarse a los escrito, que cortar alegremente la vía administrativa para presuntamente perjudicar a sabiendas al interesado no es admisible y que el órgano de prevención de la Zona está para trabajar y obedecer las órdenes impuestas por el ordenamiento jurídico; en cualquier caso, nunca para tocarse los huevos. En definitiva, que han impedido al guardia ejercer los derechos que tiene atribuidos. La realidad es que la LO 12/2007 es para unos pocos, como la disciplina; factor de cohesión común que obliga a unos más que a otros y, en consecuencia, a nadie por igual.
Lo paradójico del asunto en cuestión es saber hasta dónde van a llegar los responsables del Ministerio, cuán eslásticos son sus escrúpulos y hasta dónde se pueden estirar hasta que se rompan ante la "chocante" conducta-no por extraña, sino porque choca contra el sentido común- del dúo de Valencia.
Lo cierto es que, si cualquier subordinado del General -salvo el Coronel-, y cualquier subordinado del Coronel sin salvedad, deja de cumplir con sus obligaciones -como es el caso, no lo digo yo; lo dice la SES- y no se ajusta al procedimiento legalmente establecido, le meten un cuerno que lo levantan en peso -a las pruebas me remito-. Ahí reside la calidad moral de una persona o la ausencia de la misma, según sea el caso.
Seguro que los dos "padrinos" -no me refiero a la mafia; me refiero a la película de mexicanos- tendrán la suficiente fuerza moral para corregir a unos guardias por no llevar el cinturón de seguridad o a un suboficial por no salir de correrías en festivo -aunque lo pierdan-, porque para ellos joder es fácil y les sale gratis.
YA VEREMOS[/align]