El Trabajo. Mérito O Castigo.

[massachussets]

En cierta ocasión en empresario que dirigía una empresa que daba servicios de internet, vino a denunciar que había sufrido un ataque informático y a consecuencia del mismo había perdido el control absoluto de sus aplicaciones, el “hacker” había conseguido adueñarse como administrador único, el daño sufrido fue enorme. Se me ocurrió preguntarle qué sentía hacia la persona que le había hecho aquello, la respuesta fue que le gustaría contratarlo sin dudarlo un momento, que un talento así lo quería con él.

Conmigo hubo trabajando un Guardia que en cierta ocasión se quedó coyunturalmente sólo en el Equipo (PJ), lo hizo durante varios días, en ese periodo, además de los trabajos habituales, tuvo que atender la desaparición de una menor, entonces no existía SIGO (herramienta de trabajo capaz de producir espasmos), gracias a ello se libró de una ingente cantidad de trabajo burocrático que lo hubiera agotado, pues bien, no escatimó esfuerzos e intuición, le llevó tiempo, hizo sus propios apostaderos nocturnos, lo hizo bien, obtuvo resultados, dio con la menor. A mi llegada, lógicamente elaboré un parte de aquello y propuse una felicitación. Pasó el tiempo como si nada. Un día llegó el padre de la menor y quiso ver al Guardia, le agradeció su esfuerzo y me preguntó qué podía hacer para mostrar su gratitud ante sus Jefes, le dije que escribiera una carta y la dirigiera a la Comandancia, lo hizo. A los pocos días me llamaron, habían recibido la misiva, me preguntaron si yo había hecho parte de aquello, les dije que sí y le di los datos de nº y fecha del escrito, al poco llegó una felicitación (un papelito ramplón intrascendente).

No he contado nada que os resulte extraño, estáis familiarizados con este tipo de situaciones. Pero... siempre hay un pero... una observación que sitúa a nuestra institución nuevamente fuera del rango de la normalidad, ¿qué se ha hecho con el significado del término “mérito”?, o mejor dicho, ¿en qué ámbitos se está utilizando?

En nuestros concursos-oposición los baremos evalúan méritos ¿no?, para nuestras vacantes ya hay toda una categoría llamada “concurso de méritos”, se han elaborado unas tablas que te dicen que es mérito y que asignan unas puntuaciones para realizar cálculos aritméticos.  Bueno hombre, bueno, está claro que al contrario que sucede en derecho penal en el que no existe la prueba tasada sino el principio de libre apreciación de la misma por el órgano juzgador (según su prudente arbitrio, que no
arbitrariedad), para lo que hay que conocer muy bien el fondo. Aquí el que juzga, o más bien evalúa, no quiere complicarse, le  resulta más sencillo aplicar unas simples tablas, es decir, que se le dé todo mascado, ¿suena de algo?.

Pero claro en esta tesitura, yo no sé si el Guardia del Equipo en lugar de dedicar un esfuerzo muy ¿meritorio? para localizar a una menor, consciente de la escasa repercusión que ello iba a tener en su trayectoria profesional, tal vez hubiera decidido pasarse al cómodo régimen general y dedicarse a estudiar, quién sabe, si una carrera, si idiomas, prepararse algún módulo profesional... total si el mando no evalúa su trabajo porque no quiere tomarse la molestia... ¿para qué ejercer de avezado Guardia Civil en sentido
propio?.

Esas tablas definitorias de méritos tienen un efecto intrínsecamente perverso... presuponer la buena disposición del meritado. Por ser licenciado en derecho ¿dedicará ese conocimiento en alcanzar objetivos propios de nuestra función?, o el arquitecto, el ingeniero, o el que sabe idiomas... A mi pobre Guardia del Equipo le sobraba interés y disposición ¿a quién le importó?, ¿quién puso nota a su trabajo?.

Se evalúan cosas que no son trabajo cuando éste, si es bueno, contiene en sí mismo conocimientos y cualidades. Todo trabajo debiera ser evaluado, también el de los jefes y no solamente o necesariamente por otros Jefes.

El trabajo es evaluable, siempre lo ha sido. ¿Porqué no se define cuál es nuestro trabajo, se establecen criterios de valoración y se le asigna nota?. No es necesario evaluar facultades profesionales o personales (IPECGUCI), el trabajo lo lleva implícito, es aprehensible por los sentidos, objetivable encantidad, calidad y resultados.

Sólo una categoría de personas pueden temer a la evaluación del trabajo: los que no lo hacen.

[Ryback]

Totalmente de acuerdo. Creo que todos valoramos que un gc de cualquier empleo en algún momento de su vida haya realizado unos estudios, que sin duda, es meritorio. Pero como bien dices, no se valora suficientemente y de una manera objetiva la competencia profesional. Las tablas y baremos además sospechosamente van cambiando, quien sabe en base a qué intereses...